Más de 65 trabajadores de Cardiovida, empresa que presta servicios especializados de cardiología al Hospital Universitario Julio Méndez Barreneche, llevan seis meses sin recibir salario debido a una deuda de cerca de $5 mil millones. La situación amenaza la atención de cientos de pacientes del Magdalena, La Guajira y la región ribereña.
Desde 2019, la comunidad magdalenense y del Caribe ha contado, por primera vez, con un servicio integral de cardiología y cirugía cardiovascular en un hospital público. Esto gracias a la alianza estratégica entre Cardiovida y el Hospital Universitario Julio Méndez Barreneche, que permitió la construcción de infraestructura, dotación biomédica y personal especializado para atender a pacientes de regímenes subsidiado, contributivo y especiales.
Sin embargo, desde abril de 2024, la Gobernación del Magdalena y las directivas del hospital han intentado terminar el contrato de manera unilateral, dejando de radicar ante las EPS los servicios prestados por Cardiovida. Esta situación ha generado un déficit de más de 5.000 millones de pesos, afectando el pago a médicos, enfermeras y demás personal, y poniendo en riesgo la continuidad del servicio.
La empresa advierte que, de no solucionarse la situación, se suspenderán las actividades, afectando a más de 65 trabajadores y a cientos de pacientes que dependen de este servicio vital para su salud y su vida.